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La ampliación del aeropuerto de Barcelona está paralizada de momento
El futuro del aeropuerto de Barcelona ha vuelto a dividir a los socios de Govern. Esta vez ha sido la iniciativa del vicepresidente de la Generalitat, Jordi Puigneró, para intentar reabrir la negociación sobre la ampliación la que ha puesto a prueba otra vez las relaciones entre ERC y JxCat.
Las divergencias han subido un nivel más y los republicanos rechazan ahora cualquier proyecto que implique la extensión de El Prat. “No estamos a favor de ampliar el aeropuerto, pero sí de debatir cómo mejorar esta infraes-tructura”, dijo la portavoz de ERC, Marta Vilalta, tras la ejecutiva del partido el lunes. Puigneró tiene previsto comparecer en comisión parlamentaria mañana para fijar su hoja de ruta sobre el aeropuerto. El también titular de Territori es partidario de buscar alternativas para ampliarlo y potenciar las conexiones y los vuelos intercontinentales sin dañar la laguna de La Ricarda.
La opción que barajan en su departamento es la de extender la tercera pista hacia el este por debajo de los 500 metros propuestos inicialmente por Aena, minimizando así el impacto sobre La Ricarda. Para compensar, plantean alargar la pista también hacia el oeste, hacia el espacio protegido del Remolar. En todo caso, más allá de cuestiones técnicas concretas, la conselleria pretende rescatar la negociación, después de que el Gobierno suspendiera la inversión de 1.700 millones de euros en septiembre.
Pero los planes de Puigneró han caído como una tormenta sobre sus socios. Tanto es así que ahora ERC se opone a todo lo que conlleve una ampliación. Esto supone un giro respecto a lo pactado entre ERC y JxCat el 4 de septiembre, justo después de las declaraciones del president Pere Aragonès cuestionando el acuerdo con Aena y que provocaron un conato de crisis en la Generalitat. Entonces JxCat y ERC pactaron trabajar para hacer posible la ampliación siempre que se protegiera la laguna de La Ricarda. Los socios del Govern siguen así alejados en un tema fundamental, como es el de las infraestructuras y la conectividad aérea de Catalunya. La eventual ampliación del aeropuerto es además uno de los puntos que dificulta la negociación de los presupuestos catalanes con los anticapitalistas de la CUP, contrarios a la extensión de El Prat. Pese al ofrecimiento de los socialistas catalanes, los republicanos siguen priorizando al partido antisistema para sacar adelante las cuentas.
La iniciativa de vicepresidencia ha sido bien recibida, en cambio, por los socialistas catalanes. El PSC aceptó “de buen grado” que Territori plantee una nueva propuesta de ampliación, si bien pidió aclarar los términos y si es compartida por todo el Govern. “Hay que ser serios y hacer propuestas concretas”, señaló el portavoz adjunto del PSC, Raúl Moreno. “Espero que esta propuesta sea compartida por el conjunto del Govern”, insistió. De momento, no parece que sea así.
Muy diferente fue la reacción de los comunes, socios de los socialistas en el Gobierno central y en el Ayuntamiento de Barcelona. El portavoz y diputado en el Congreso, Joan Mena, exigió al vicepresidente de la Generalitat “dejarse de ocurrencias” sobre la posible extensión y reclamó que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, la descarte.
“Nos dirigimos a Aragonès. Debe dejar claro si da a apoyo o no a esta nueva ocurrencia de Puigneró. Esperamos que Aragonès y ERC digan que están en contra” de este plan alternativo, subrayó Mena. Algo que ya han hecho los republicanos.
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